Arquitectura Neoclásica.
La arquitectura neoclásica se caracterizó por el renacimiento de la arquitectura clásica o grecorromana, con especial atención a los órdenes griegos (dórico, jónico y corintio), las proporciones armónicas, la simplicidad de las formas geométricas, la grandeza de escala y la preferencia por las paredes en color
blanco. La arquitectura neoclásica surgió como una reacción al barroco y al rococó, que se consideraban excesivos y ornamentales.
El Panteón de París es un monumento de estilo
neoclásico que se inspiró en la arquitectura clásica o grecorromana. Su fachada
imita la del Panteón de Roma, con un pórtico de columnas corintias y un frontón
triangular. Su cúpula, que se eleva a 83 metros de altura, está formada por
tres casquetes concéntricos que se apoyan en un tambor con 16 columnas. El
interior del edificio tiene una planta en forma de cruz griega, con cuatro
naves y cuatro capillas. El Panteón alberga los restos de personalidades
ilustres de la historia de Francia, como Voltaire, Rousseau, Victor Hugo, Marie
Curie y otros.
Su arquitecto fue Jacques-Germain Soufflot, nacido en
1713 en Irancy, Francia. Soufflot fue un arquitecto francés que estudió las
obras de la Antigüedad y las de Palladio en Italia. Se instaló en Lyon, donde
realizó la Loge de Change y el Hôtel Dieu. En 1754 se trasladó a París por
encargo de Madame de Pompadour, que lo eligió para acompañar a su hermano
Marigny en un viaje por Italia. Soufflot fue nombrado superintendente de los
edificios del rey y miembro de la Academia real de arquitectura. Su obra más
famosa es el Panteón de París, que empezó a construir en 1764 por encargo del
rey Luis XV, que quería una iglesia dedicada a santa Genoveva. Soufflot murió
en 1780 sin ver terminada su obra, que fue concluida por sus colaboradores Rondelet
y Brébion. Soufflot está enterrado en el propio Panteón.
La arquitectura neoclásica es un estilo arquitectónico
que se inspiró en la arquitectura clásica o grecorromana, pero que también
incorporó elementos de la arquitectura palladiana, renacentista y barroca. La
arquitectura neoclásica se desarrolló en Europa entre los siglos XVIII y XIX,
en un contexto de ilustración, racionalismo y nacionalismo. La arquitectura
neoclásica se caracterizó por:
- La
búsqueda de la belleza, la armonía, la proporción y la simetría, siguiendo
los principios de Vitruvio un arquitecto romano que escribió el tratado De
architectura.
- El
uso de los órdenes clásicos (dórico, jónico y corintio), que son sistemas
de columnas con diferentes características y proporciones. El orden dórico
era el más simple y austero, el jónico era más elegante y refinado, y el
corintio era el más ornamental y sofisticado.
- El
empleo de elementos arquitectónicos como el frontón, el pórtico, la
cornisa, el friso, la ménsula, el arco de medio punto, la bóveda de cañón
y la cúpula.
- La
preferencia por las fachadas planas y lisas, con pocos relieves o adornos.
El color blanco era el más utilizado para las paredes, ya que resaltaba la
pureza y la claridad de las formas.
- La
influencia de la arquitectura palladiana, que se basaba en las obras del
arquitecto italiano Andrea Palladio, que a su vez se inspiró en los
edificios antiguos de Roma y Grecia. La arquitectura palladiana se
caracterizó por el uso de la planta centralizada, el módulo como unidad de
medida, la simetría axial, el empleo de puentes y logias, y la combinación
de elementos clásicos y vernáculos.
- La
adaptación de los estilos históricos a las necesidades y gustos del
presente. La arquitectura neoclásica no fue una simple imitación o copia
de los modelos antiguos, sino una reinterpretación creativa y original. La
arquitectura neoclásica se relacionó con los movimientos políticos y
culturales de su época, como la Revolución Francesa, la Independencia de
Estados Unidos, el Imperio Napoleónico y el Romanticismo.
Algunos ejemplos de arquitectura neoclásica son:
- El
Panteón de París, diseñado por Jacques-Germain Soufflot, que es una
iglesia convertida en mausoleo de personalidades ilustres de Francia. Su
fachada imita la del Panteón de Roma, con un pórtico de columnas corintias
y un frontón triangular. Su cúpula es una obra maestra de ingeniería y
luz.
- El
Capitolio de Washington, diseñado por William Thornton, que es la sede del
Congreso de Estados Unidos. Su fachada tiene un pórtico con columnas
jónicas y un frontón con un relieve alegórico. Su cúpula está inspirada en
la de San Pedro del Vaticano.
- La
Puerta de Brandeburgo, diseñada por Carl Gotthard Langhans, que es un
monumento emblemático de Berlín. Su fachada tiene un pórtico con columnas
dóricas y un frontón con una escultura de la diosa Victoria en un carro
tirado por cuatro caballos. Su diseño se basa en el Propileo de Atenas.
·
La arquitectura
neoclásica surgió en Europa durante la segunda mitad del siglo XVIII, como una
respuesta al estilo barroco y rococó que prevalecía en la época. Se buscaba
retomar la grandeza y la perfección estética de la antigua Grecia y Roma,
consideradas cunas del arte clásico. El Capitolio de Washington es el edificio
que alberga las dos cámaras del Congreso de los Estados Unidos: el Senado y la
Cámara de Representantes. Es uno de los símbolos más reconocibles de la
democracia estadounidense y un ejemplo de la arquitectura neoclásica. El
Capitolio se encuentra en el barrio Capitol Hill en Washington D. C., la
capital del país. El Capitolio tiene una historia de más de 200 años y ha sido
testigo de muchos acontecimientos importantes, como la inauguración de
presidentes, la declaración de guerras, la aprobación de leyes y la celebración
de ceremonias.
El Capitolio fue diseñado inicialmente por William
Thornton, un médico y arquitecto nacido en las Islas Vírgenes Británicas. Su
diseño se inspiró en el Panteón de París y el Panteón de Roma, dos edificios
clásicos con una gran cúpula central. Thornton ganó un concurso convocado por
el presidente George Washington y el secretario de Estado Thomas Jefferson en
1792 para elegir el mejor diseño para el Capitolio. La construcción del Capitolio
comenzó en 1793 con la colocación de la primera piedra por parte de Washington.
Sin embargo, el proyecto sufrió varios retrasos, cambios y dificultades, como
la falta de fondos, la escasez de materiales, la guerra con Gran Bretaña y el
incendio provocado por los británicos en 1814.
El Capitolio fue modificado y ampliado por varios
arquitectos a lo largo del tiempo, como Benjamin Henry Latrobe, Charles
Bulfinch, Thomas Ustick Walter, August Schoenborn y Edward Clark. El Capitolio
actual tiene una planta en forma de cruz latina, con una cúpula de hierro
fundido que se eleva a 88 metros de altura y dos alas laterales que albergan
las cámaras legislativas. El ala norte corresponde al Senado y el ala sur a la
Cámara de Representantes. El Capitolio tiene cinco pisos, incluyendo un sótano
y un ático. El interior del edificio está decorado con pinturas, esculturas,
frescos y relieves que representan escenas y personajes de la historia
estadounidense. Entre las obras más destacadas se encuentran el fresco La Apoteosis
de Washington, pintado por Constantino Brumidi en la bóveda de la cúpula; el
friso del Capitolio, que narra la historia del país desde el descubrimiento
hasta la aviación; y la Estatua de la Libertad, que corona la cúpula y
simboliza la libertad y el progreso.
El Capitolio está rodeado por un amplio parque
llamado Complejo del Capitolio, que incluye otros edificios como la Biblioteca
del Congreso, la Corte Suprema, el Jardín Botánico y los edificios de oficinas
para los senadores y representantes. El parque también cuenta con fuentes,
estatuas, monumentos y árboles. El Capitolio es visitado cada año por millones
de turistas que pueden acceder al edificio a través del Centro de Visitantes
del Capitolio, inaugurado en 2008. El Centro ofrece exposiciones, películas,
maquetas y tours guiados por el interior del edificio. El Capitolio también es
escenario de eventos especiales como conciertos, festivales y ceremonias
cívicas.
La puerta de Brandeburgo es un monumento neoclásico del siglo XVIII
situado en Berlín, la capital de Alemania. Fue construida por orden del rey de
Prusia, Federico Guillermo II, como una de las dieciocho puertas del Muro de la
Aduana de Berlín, que rodeaba la antigua ciudad fortificada. La puerta se
inspiró en la arquitectura clásica o grecorromana, especialmente en el Propileo
de Atenas, y se caracterizó por el uso de los órdenes clásicos (dórico, jónico
y corintio), la simplicidad de las formas geométricas, la grandeza de escala y
la preferencia por las paredes en color blanco. La puerta está coronada por una
cuadriga de cobre que representa a la diosa Victoria en un carro tirado por
cuatro caballos, que fue añadida en 1795. El arquitecto que diseñó la puerta
fue Carl Gotthard Langhans, que también realizó otras obras neoclásicas en
Berlín y otras ciudades alemanas.
La puerta de Brandeburgo es uno de los símbolos más
conocidos de Berlín y de Alemania, y ha sido testigo de importantes
acontecimientos históricos y políticos. La puerta fue tomada por las tropas de
Napoleón en 1806, que se llevaron la cuadriga a París como botín de guerra. La
cuadriga fue recuperada en 1814 y restaurada con una cruz de hierro y un águila
prusiana. La puerta sufrió graves daños durante la Segunda Guerra Mundial, que casi
destruyeron la cuadriga. En 1956, ambas partes de la ciudad dividida
colaboraron para reconstruir la puerta. En 1961, la puerta quedó aislada entre
el este y el oeste por el Muro de Berlín, que impedía el paso a través de ella.
En 1989, la caída del muro permitió la reunificación de la ciudad y la
celebración multitudinaria en la puerta. En 1990, la puerta fue restaurada y se
le quitó la cruz de hierro y el águila prusiana. Desde entonces, la puerta ha
sido escenario de diversos eventos culturales, sociales y políticos, como
conciertos, festivales y ceremonias cívicas.
La puerta de Brandeburgo se encuentra en el centro de
Berlín, en Mitte, en la intersección de Unter den Linden y Ebertstraße, al
oeste de la plaza de París. Una manzana al norte está el edificio del
Reichstag, que alberga el Parlamento alemán (Bundestag). La puerta constituye
la entrada monumental a Unter den Linden, un bulevar con tilos que conduce
directamente al Palacio Real de los monarcas prusianos. La puerta es visitada
cada año por millones de turistas que pueden admirar su majestuoso aspecto
tanto de día como de noche.
Ver:
Arterama, Barcelona. 2007.
Solo para uso educativo.
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